En este, mi primer juego, lo primero que hice fue plantearme el cómo será la jugabilidad, y una vez hecho eso busqué un contexto acorde a la jugabilidad (la premisa del juego) y al dejé lo de la historia para el final... ya que creo que la historia tiene que adaptarse al juego y no al revés...
Aún así, haber hecho la jugabilidad antes me hizo hacer más fácil el argumento... ya que esas "limitaciones" restringían el ilimitado abanico de historias que se podían crear (si uno no se impone restricciones no tiene un punto de partida desde el cual empezar)... y al final la historia se fue armando sola, de manera natural y acorde con las mecánicas del juego.
Finalmente, tengo que decir que dejar la historia para el final no significa que no sea importante en Legend Tracker... al contrario, el contexto es lo que le da significado y le da diversión a CUALQUIER mecánica de juego. Por ejemplo, hagan el siguiente ejercicio: piensen en cualquier juego que les guste, y mentalmente quítenle todos los sprites, fondos, animaciones de los personajes y texturas, y olvídense de que tuviese una historia o contexto...
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¿No es divertido cierto?... incluso en juegos competitivos, en que la diversión la da ganar (como Smash Bros o Age of Empires) serían aburridisimos sin un contexto que los apoye.
Bueno, despues de esta larga introducción, los dejo con el argumento de Legend Tracker:
En el espacio existe un imperio de gran magnitud, que conquista planetas para obtener sus minerales y esclavizar a sus habitantes: los Brits. En principio, los Brits parecen pequeñas criaturas grisáceas inofensivas, pero cuando alcanzan su etapa adulta, son capaces de absorber material genético de otras criaturas para transformarse en ellas. Así, los Braits -Brits en etapa adulta- se volvieron poco a poco en una de las especies más genéticamente perfectas del Universo.
No pasó mucho tiempo para que los Brits llegaran a la Tierra. Destruyeron todo a su paso, humanos, animales, plantas. La Tierra quedó convertida en un lugar inhabitable a merced de los Brits, que continuaron su tarea de extraer minerales.
Un poco antes de la llegada de los Brits, en la Tierra, un científico logró crear el primer robot con inteligencia artificial similar a la humana. Este robot estaba programado para ser un guardaespaldas. Estaba capacitado para poder encontrar y proteger a la persona que se le ordenase.
Al llegar el ataque de los Brits a la Tierra, el científico se vió acorralado en su laboratorio por los invasores. Tomó a su robot y, antes de ser asesinado, le dió una orden precisa: protege a mi hija. El laboratorio fue destruido y el robot quedó atrapado dentro. Por más que intentó, no pudo salir y su energía solar se agotó, por lo que inevitablemente se apagó. Esto mientras los habitantes de la Tierra eran asesinados, y sólo unos pocos dejados con vida.
Pasaron 10 años de la invasión, y los escombros del laboratorio que sellaban su entrada se volvieron a derrumbar, abriendo una pequeña entrada a la luz, luz que llegó al robot que llevaba dormido tantos años y que recién pudo despertar.
Nada de la memoria del robot Abos quedó, salvo una sóla orden: protege a mi hija. Al ser un robot, no tiene poder de decisión, por lo que esa orden debe cumplirla, independiente de que no sepa quien sea a quien debe proteger. En este punto empieza la travesía de Abos por recuperar sus recuerdos y hallar pistas de la hija del científico.
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